16 jul 2013

Extraño estar con él, sus abrazos, la forma tierna en que me 
habla, su sonrisa y a la vez extraño cuando está serio. 
Extraño acariciar su pelo, sus ganas de hacerme reír, 
caminar a su lado y no importa a donde, 
la inseguridad pasa a un segundo plano cuando él 
me lleva de la mano. 
Odio no poder estar todos los días a su lado 
y tener que esperar a que sea otro día para verlo. 
Y a pesar de lo mucho que lo pueda extrañar, nada en 
éste mundo ayuda a que la nostalgia de no tenerlo, se valla. 
Las canciones, la televisión, incluso salir a la calle para comprar 
algo, ya me recuerda a él y a lo mucho que lo necesito. 
Todas las esquinas guardan un recuerdo de nosotros, 
por más ridículo que sea. 
Parece que el mundo entero se pone de acuerdo 
para decirme en la cara: "¡HOY NO LO VISTE!"


No hay comentarios:

Publicar un comentario