Supe que sería él porque desde el momento que ingresó a mi vida no paró ni un solo día en hacerme sonreir.
Hasta el día de hoy, no se cansa de ayudarme a luchar con los bajones terribles, hasta ahora está para decirme lo preciosa que luzco.
Supe que era él desde el preciso momento en que me miró a los ojos y dijo que nunca me fallaría y que me amaba mucho. Entonces entendí que no podía haber merecido más.
Que él era talvez el indicado para mí y que si podía jugarmela por él, él también lo haría por mí.
Te amo infinitamente